La campaña lleva por nombre “Hagamos un nuevo trato de corresponsabilidad para crecer juntos en un país mejor” replicado en todo el país a través del Programa Buenas Prácticas Laborales con Enfoque de Género del Sernam.
Según afirmó la Directora Regional del Sernam, Marisol Salvo Meneses, las trabajadoras del país cargan la doble responsabilidad de cumplir con sus labores en un puesto de trabajo remunerado y realizar también otras labores como atender a hijos e hijas, concluida su jornada laboral.
“Si bien los índices de inserción laboral femenina son bajos en Chile, todo indica que debemos repuntar estas cifras en los próximos años. Es por ello que esta campaña tiene un doble significado. Por un lado, servir de pivote para facilitar a que las mujeres trabajen y entregar a los hombres la posibilidad de compartir más con sus hijos y ayudar en las tareas del hogar”.
Labores compartidas
Según un Informe del PNUD -Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo-, sólo el 15 por ciento de los hombres lleva a sus hijos a una consulta médica, el 20 por ciento afirma ordenar la cama y el 17, dedicarse a tareas como planchar y lavar la ropa.
En tanto que una encuesta realizada por la consultora Opina S.A. que indagó la participación de los padres en la crianza de hijos e hijas determinó que el 62 por ciento argumentó como limitante las jornadas laborales para estar más tiempo con sus hijos. Un 55 por ciento afirmó que estaría dispuesto a sacrificar el sueldo para estar más tiempo con su familia y un 73, aseveró que es necesario aumentar los días del post natal masculino.
“Está comprobado que mientras más modernos, los hombres no tienen problemas en asumir las tareas domésticas. Así como tenemos casos ejemplares de mujeres realizando trabajos relacionados con la minería, espero que los hombres tengan la misma determinación en este otro plano valiosísimo como es el cuidado del hogar”.
Reafirmación gubernamental
La Directora del Sernam sostuvo que el Gobierno está empeñado en promover un cambio cultural, porque “cuando queremos optar a una mejor calidad de vida, claro que es determinante que la mujer trabaje, pero para esto la pareja debe negociar un nuevo trato en el hogar”.
Este cambio estaría sustentado en parte a través de una reformulación del post natal, la desvinculación de los costos de la maternidad a la mujer y la eliminación del requisito que obliga a las empresas a contar con sala cuna sólo cuando el número de trabajadoras supera las veinte.
Según Salvo Meneses, el Gobierno propugna también crear un mecanismo de certificación a las buenas prácticas de conciliación familiar al interior de las empresas; así como fomentar el programa 4 a 7 de extensión horaria para que quienes estudian se queden más tiempo en los colegios mientras padre y madre terminan su jornada laboral.