En la sede gremial de la CChC Antofagasta tuvo lugar la primera actividad enfocada en la primera meta del “Plan de Trabajo del APL de la Construcción”. Esta sesión, titulada “Capacitación manual gestión RCD y formatos para diagnóstico”, se concentró en la estimación, caracterización y cuantificación de los “Residuos de Construcción y Demolición” (RCD) y el consumo hídrico. En este encuentro, se entregaron formatos y cuestionarios estandarizados a los adherentes, los cuales desempeñarán un papel fundamental en la recopilación de datos en sus respectivas obras e instalaciones. Esta herramienta es vital para asegurar la eficacia del “Plan de Gestión de Residuos y Demolición”, marcando un paso adelante en las prácticas de construcción sostenible en la región.
“En la Cámara Chilena de la Construcción, estamos profundamente comprometidos con impulsar una industria más sostenible. Por ello, seguimos rigurosamente cada fase del Acuerdo de Producción Limpia (APL) al cual nos hemos adherido. Hemos dado un paso significativo al capacitar a nuestros miembros con herramientas esenciales para la recolección y análisis de datos. Este esfuerzo es vital para la implementación efectiva de nuestro Plan de Gestión de Residuos y Demolición. Nos encontramos en un punto decisivo para la industria, avanzando hacia prácticas más responsables y sostenibles en nuestra región”, señaló la past presidenta CChC Antofagasta, Marcela Torres Moraga.
En el mismo sentido, en un esfuerzo colaborativo, se conformó la “Mesa de Trabajo Público-Privada RCD Región de Antofagasta”. Este grupo intersectorial tiene la tarea de desarrollar una estrategia regional integral para la valorización y disposición final de residuos, abordando la escasez de sitios autorizados. Dentro de sus funciones, se contempla la realización de charlas sobre normativas legales, lo que facilitará el financiamiento de proyectos de valorización público-privados. Además, se desarrollará una guía para implementar distintos modelos de negocio en este ámbito, incluyendo centros de valorización, estaciones de transferencia y tratamiento integral de residuos.
Entre los integrantes de la Mesa de Trabajo está el Gobierno Regional, cuyo rol será fundamental en la promoción de la economía circular dentro el APL.
“El Gobierno Regional puede financiar proyectos que van asociados hacia la implementación de economía circular, y en el APL de la CChC la idea es que nosotros podamos ir financiando asesorías para la generación de proyectos que permitan vincularnos desde una perspectiva mucho más saludable con nuestro entorno. En tal sentido nos parece que hay que aumentar la cantidad de plantas recicladoras, disminuir la cantidad de residuos que se botan por cada familia de la región, y además ir visualizando cómo avanzamos en conjunto con la industria hacia planes de economía circular que nos permitan ir recuperando especias que se puedan mejorar. La clave es insistir en reducir los residuos, reutilizar los que se puedan reutilizar y reciclar lo reciclable”, declaró el Gobernador Regional Ricardo Díaz.
Una de las metas clave será trabajar con la Comisión Regional de Construcción Sustentable (CORECS) para fomentar la economía circular en las licitaciones de infraestructura y vivienda. También se planea elaborar un catastro de pozos lastreros y sitios similares aptos para la disposición final, información que será entregada a las autoridades pertinentes.
“La formación de la Mesa de Trabajo Público-Privada RCD en Antofagasta es un paso crucial en nuestra misión hacia la sostenibilidad. Con representantes de diversos sectores, estamos creando estrategias integrales para la valorización y disposición de residuos, fomentando modelos de negocio sostenibles y la economía circular. Este esfuerzo conjunto con actores clave, incluyendo la academia y el sector privado, refleja nuestro compromiso con prácticas innovadoras y responsables en la construcción”, expresó Torres.
La mesa de trabajo cuenta con una participación diversa y comprometida, incluyendo representantes del Gobierno Regional, MINVU, SERVIU, las Seremis de Medio Ambiente y MOP, así como importantes actores del sector privado como EBCO, Guzmán y Larraín, y Servilinares. La academia también juega un rol crucial, con la participación de la Universidad Católica del Norte y la Universidad de Antofagasta.
Desde la Empresa Portuaria de Antofagasta (EPA) señalaron que su adhesión al APL radica en un compromiso sostenido con el desarrollo sustentable y constante participación en proyectos de vinculación y mediación con las comunidades aplicando los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobierno corporativo), en la promoción y participación en educación ambiental, en la adopción de tecnologías más limpias en las operaciones portuarias, entre otras acciones.
Agregaron que, “esperamos que el APL impulsado por la CChC Antofagasta sea una herramienta con la que podamos generar un trabajo colaborativo que logre reducir impactos y residuos e impulse el reciclaje, la económica circular y la creación de una cultura ambiental que optimice el uso de recursos y disminuya la generación de residuos”.
Estas acciones reflejan el compromiso de Antofagasta con un desarrollo urbano más sostenible y consciente, liderando el camino hacia prácticas de construcción más respetuosas con el medio ambiente y eficientes en el uso de recursos.