Resultado de limpieza en Playa Llacolén deja ver mayoría de residuos COVID
Cerca de 400 kilos fue lo que se extrajó de basura en el sector, dentro de los cuales se encontraban en su mayoría mascarillas, colillas de cigarros y botellas de cerveza. Entre vecinos del sector, voluntarios, instituciones y organizaciones logró dejar el sector que abarcó desde la poza de los gringos hasta la playa Llacolén lo más limpio y expedito posible.
La actividad realizada por el Círculo de Seguridad y Protección de la Bahía contó con la presencia de la Armada de Chile, Sernapesca, Cuarta Compañía de Bomberos de Antofagasta, Suatrans, Remm Emergencias, Fundación Desierto Azul, Fundación Fluye, ATI Puerto Antofagasta, Liceo Andrés Sabella, Empresa Intersales, Fundación Humboldti, Rotary Caliche, Vitrina Norte y Santo Tomás, entre otros.
El Seremi de Medio Ambiente de la región Antofagasta, Gonzalo Bravo, comentó sobre el operativo que, “los residuos COVID son muchos, y se demoran mucho en degradar”, haciendo a la vez un llamado a tomar consciencia y a poder colaborar, siempre que se esté en la playa y en cualquier lugar con respecto a nuestros residuos.
Más de 100 personas fueron las que colaboraron con este evento, siendo en su mayoría estudiantes de instituciones educacionales de la ciudad, llegando a contar incluso con tres carreras de Santo Tomás, como lo fueron Técnico en Turismo, Técnico en Gestión Medio Ambiental y Técnico en Energía Solar, quienes aportaron cada una desde su área a educar a la población respecto a las problemáticas del Medio Ambiente y las posibles soluciones que se pueden ir efectuando en el cotidiano vivir para obtener beneficios respecto a esta problemática.
Yohanna Abarzúa, directora de la carrera de Técnico en Gestión de Medio Ambiente del Centro de Formación Técnica de Santo Tomás sede Antofagasta, se refirió a la actividad explicando que, “como directora destaco de esta actividad la oportunidad que tuvimos para compartir la importancia de la Educación Ambiental a la comunidad, para tomar consciencia de los residuos que generamos a diario y cuál es su paradero final, que en este caso serían las playas de nuestra ciudad, lo que terminaría afectando directamente la biodiversidad presente en nuestras costas, siendo esto sumamente nocivo, incluso para nosotros”.
